Política cero
Jairo Calixto Albarrán
2009-06-15• MILENIO.
-->
Ha muerto un niño más de la tragedia bíblica de Hermosillo. Su pobre cuerpo lacerado finalmente descansó. Evoco la naturaleza salvaje y abrasiva que cargó con él y otros 45 chicos, y el origen de todo esto en un entrecruzamiento despiadado de corruptelas, compadrazgos y amiguismos ligados a la mexicana alegría del poder y sus complicidades. Pienso en la proverbial estupidez que, apareada frenéticamente con la ambición y la impunidad en un menáge a trois pornocrático, no podían sino producir monstruos como corresponde a los sueños de la sinrazón.
Coludidos con el profundo caos que gobiernan las instituciones gubernamentales como el IMSS y la Sedesol lobotomizados por el clientelismo electoral y la lógica eficientista del capitalismo jíbaro, está la parentela del gobernador Bours metida en el jugoso bisne de la subrogación parvularia; los funcionarios e inspectores que se hicieron de la vista gorda por vocación profesional; amén de los heroicos burocratotas de Protección Civil que no saben diferenciar entre una salida de emergencia y una trampa mortal.
Van 46 niños sacrificados en la hoguera de las vanidades del sistema. Aquí lo único que importa es el debate entre Bety Paredes y Germy Martínez El Malo, uy qué malo, hay que comprarle su lión. Eso y el escándalo autolacerante en el PRD en la disputa por Iztapalapa donde a la Brugada se la subrogaron. O la guerra contra el narco que, a pesar de su brutalidad patriotera, no ha generado ni desabasto ni encarecimiento en la canasta básica de los estupefacientes. Mientras, la PGR ha dictaminado que el asesinato de nuestro compañero Eliseo Barrón fue para intimidar a la prensa, como si después de 49 víctimas impunemente aniquiladas la prensa no estuviera suficientemente intimidada.
Ya no se sabe qué da más terror, si la lasciva crueldad de los narcosicarios o el agobiante, ojete, valemadrismo que desemboca en monstruosidades como la de la estancia ABC, que convierte a todos los involucrados (seudoempresarios, seudoservidores públicos, seudopersonas) en sicarios más perversos que cualquiera a las órdenes del Chapo.
Y lo peor es que ni Bours ni Calderón, ni los mortuorios del Verde, ni los gemelos diabólicos de PT & Convergencia, ni la Maestra, Don Beltrone, ni los del PRIcámbrico temprano o los perredistas, El Peje, Los Chuchos, la Iglesia panchera y menos los candidatos que están chingue y jode con sus propuestas deslactosadas, ninguno de ellos está haciendo nada para que tragedias como la de Hermosillo no vuelvan a ocurrir.jairo.calixto@milenio.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario