ELECCIONES FEDERALES 2012: MAS CIRCO,MENOS DEMOCRACIA.

Alejandro Alvarez   Difícil es comprender cómo uno de los principales ejercicios de la democracia, como es la práctica electoral, esté tan plagado de irregularidades –por no hablar de ilegalidades- y que se sigan considerando como ejemplo de civilidad y centro de la atención de medios y de gasto inmoral de recursos públicos. Partidos en lo individual, y pre alianzas de ellos, no le paran a sus actos proselitistas desde hace meses cuando oficialmente tan sólo las llamadas precampañas deberían iniciar oficialmente en la tercera semana de diciembre. Precandidatos de todos los partidos van y vienen, unos se apuntan otros se borran, arrecian sus apariciones públicas, pagan desplegados periodísticos. Acarrean masas de entusiastas acémilas, que igual que hace treinta o cuarenta años agitan banderitas, avientan confeti y gritan vivas a los seudolíderes sedientos de poder. Las autoridades electorales federales se hacen de la vista gorda ante un monstruo incontrolable: esos partidos que se sienten dueños del país que hacen y deshacen sus propias reglas, a capricho.  Para muestra ahí está el penoso hecho de que contraviniendo todas las reglas, leyes y normas se han pasado por el arco del triunfo su obligación de que a través de sus diputados –porque son diputados de sus partidos, no de la ciudadanía- elijan a los tres consejeros del IFE que están vacantes desde hace más de un año. El proceso electoral de 2012 arrancó a principios de octubre y todavía hoy el Consejo General del Instituto Federal Electoral está incompleto y sin perspectivas de integración en el corto plazo. Esos mismos partidos cuando se inconformen por los resultados –porque juren que volverán los gritos de quienes se sientan fraudeados y presidentes legítimos-, decía que esos mismos alegarán que hubo torceduras legales producto de un IFE mocho. Siendo ellos mismos los causantes de esta ilegalidad.  Y como a río revuelto ganancia de abusadores (o como se diga) la Junta General Ejecutiva del IFE se aprobó un aumento de 150 mil pesos para cada uno de los seis consejeros electorales con el argumento de que tienen ‘sobrecarga de trabajo’, debido a la falta de tres consejeros. La cacareadísima reforma política ha sido otro montaje circense, después de gritos y sombrerazos, como el parto de los montes, salió un adefesio que ni los panistas en el senado están conformes con aprobar y ni falta que hace porque esos remedos de reforma –que no incluyen la reducción sustancial del número de diputados y senadores, ni la revocación de mandato- no podrá entrar en vigor para 2012. Así que no corran prisa señores, el pueblo aguanta eso y más. Hasta la iglesia católica le ha tundido al IFE, hace apenas unas semanas la Arquidiócesis de México a través del editorial de su semanario ‘Desde la Fe’  declaró que el IFE “se ha convertido en una enorme burocracia, cuyos consejeros gozan de sueldos insultantes… … controlado por los partidos políticos y desvinculado del interés de los ciudadanos”.  Y eso que el clero no participa en política. Qué tal si lo hiciera. Pero todo es parte del circo de tres pistas a que hacíamos referencia al principio. Ya embarcados en todo esto no hay motivos para que se hagan todo tipo de encuestas premonitorias del desenlace electoral. El Universal en su último ejercicio de sondeo publica que si hoy fueran las elecciones el PRI y su alianza se la llevaría con el 31%, le seguiría el PAN con 18% y a la cola el PRD y su alianza con 11%. Cerca del 40% de los ciudadanos aparentemente no están convencidos con ninguna opción. Los electores no sólo contemplan como posibilidad ir a las casillas y tachar un símbolo. También es opción no acudir a votar o anular el voto.